Trataré de ser breve…
La elección del Contralor, que se producirá en los próximos días, dividió por momentos la coalición uribista, horas antes de la instalación del Congreso y la elección de las mesas directivas de Cámara y Senado.
Germán Vargas y su grupo apoyan al ex ministro Carlos Medellín para ser elegido en el ente de control, mientras el Partido de la U, avala a Julio César Turbay Quintero, hijo del ex presidente liberal del mismo nombre y quien en sus últimos días defendió sin cuartel la reelección de Alvaro Uribe.
La condición de Turbay lo destacó entre los oficialistas, quienes rodearon su nombre para la Contraloría. Una decisión que no le gustó a Germán Vargas, quien comenzó a mover los hilos de la separación.
La historia
Esta semana los compromisarios de los movimientos de la coalición buscaban acuerdos para elegir presidentes del Senado y de la Cámara, a Dilian Francisca Toro y a Alfredo Cuello Baute, respectivamente.
De esta manera, la Cámara Alta quedaría en manos del Partido de la U, que obtuvo la votación más grande, y la Cámara Baja, bajo la conducción del Partido Conservador, perfilada como la segunda fuerza electoral.
Cambio Radical aceptó estos compromisos siempre y cuando la coalición respaldara a Medellín y lo eligiera Contralor General de la República.
Julio César Turbay empezó a moverse y a ganar respaldos. Incluso repartió volantes entre los parlamentarios, cual campaña electorera, y sus cuentas comenzaron a mejorar.
Así mismo, comenzó a moverse Vargas Lleras, quien incluso tocó las puertas del Partido Liberal, hoy en la oposición, y de los Conservadores para buscar otros nombres para la presidencia del Senado y la Cámara.
Ante el terremoto causado por este choque, Alas – Equipo Colombia de Luis Alfredo Ramos y Alvaro Araujo buscaron a uno de los grupos uribistas desterrados por sus presuntos vínculos con paramilitares. Apareció en escena Luis Alberto Gil y su movimiento Convergencia Ciudadana.
Gil fue invitado a la coalición, ante la inminente salida de Cambio Radical. No aceptó hasta asegurarse un puesto directivo en el Senado. Pero nadie quería a Germán Vargas fuera del uribismo.
Por eso, tras una reunión de 6 horas, este jueves en la mañana la elección del Contralor dejó de ser motivo de la discordia.
Quienes apoyaban a Turbay desistieron de mantener su pacto alrededor de su nombre y dejaron en libertad a todos los miembros de la bancada para que voten en conciencia.
Tanto Turbay como Carlos Medellín tendrán que hacer política y construir sus propias alianzas, sí es que quieren hacerse con la entidad que debe estar encima del uso de los dineros públicos y que, con seguridad, perderá su independencia lograda con la gestión de Antonio Hernandez Gamarra.
Según un reciente análisis del ex senador y posible candidato a la Gobernación de Antioquia, Luis Alfredo Ramos, en el escenario que quedó planteado, Carlos Medellín sería el virtual contralor, pues es considerado un hombre con todas las calidades intelectuales para asumir ese cargo.
La elección del Contralor, que se producirá en los próximos días, dividió por momentos la coalición uribista, horas antes de la instalación del Congreso y la elección de las mesas directivas de Cámara y Senado.
Germán Vargas y su grupo apoyan al ex ministro Carlos Medellín para ser elegido en el ente de control, mientras el Partido de la U, avala a Julio César Turbay Quintero, hijo del ex presidente liberal del mismo nombre y quien en sus últimos días defendió sin cuartel la reelección de Alvaro Uribe.
La condición de Turbay lo destacó entre los oficialistas, quienes rodearon su nombre para la Contraloría. Una decisión que no le gustó a Germán Vargas, quien comenzó a mover los hilos de la separación.
La historia
Esta semana los compromisarios de los movimientos de la coalición buscaban acuerdos para elegir presidentes del Senado y de la Cámara, a Dilian Francisca Toro y a Alfredo Cuello Baute, respectivamente.
De esta manera, la Cámara Alta quedaría en manos del Partido de la U, que obtuvo la votación más grande, y la Cámara Baja, bajo la conducción del Partido Conservador, perfilada como la segunda fuerza electoral.
Cambio Radical aceptó estos compromisos siempre y cuando la coalición respaldara a Medellín y lo eligiera Contralor General de la República.
Julio César Turbay empezó a moverse y a ganar respaldos. Incluso repartió volantes entre los parlamentarios, cual campaña electorera, y sus cuentas comenzaron a mejorar.
Así mismo, comenzó a moverse Vargas Lleras, quien incluso tocó las puertas del Partido Liberal, hoy en la oposición, y de los Conservadores para buscar otros nombres para la presidencia del Senado y la Cámara.
Ante el terremoto causado por este choque, Alas – Equipo Colombia de Luis Alfredo Ramos y Alvaro Araujo buscaron a uno de los grupos uribistas desterrados por sus presuntos vínculos con paramilitares. Apareció en escena Luis Alberto Gil y su movimiento Convergencia Ciudadana.
Gil fue invitado a la coalición, ante la inminente salida de Cambio Radical. No aceptó hasta asegurarse un puesto directivo en el Senado. Pero nadie quería a Germán Vargas fuera del uribismo.
Por eso, tras una reunión de 6 horas, este jueves en la mañana la elección del Contralor dejó de ser motivo de la discordia.
Quienes apoyaban a Turbay desistieron de mantener su pacto alrededor de su nombre y dejaron en libertad a todos los miembros de la bancada para que voten en conciencia.
Tanto Turbay como Carlos Medellín tendrán que hacer política y construir sus propias alianzas, sí es que quieren hacerse con la entidad que debe estar encima del uso de los dineros públicos y que, con seguridad, perderá su independencia lograda con la gestión de Antonio Hernandez Gamarra.
Según un reciente análisis del ex senador y posible candidato a la Gobernación de Antioquia, Luis Alfredo Ramos, en el escenario que quedó planteado, Carlos Medellín sería el virtual contralor, pues es considerado un hombre con todas las calidades intelectuales para asumir ese cargo.
Este post que acaban de leer es el número 100 de Colombia Digital.
Un blog es un ladrillo en la construcción de opinión seria y responsable, en un país viciado por el amarillismo y el sensacionalismo. Gracias a los lectores, a mis compañeros de la Generación Invisible y a todos aquellos que me animan a escribir.
5 comentarios:
Para un país Virtual como lo es en éstos momentos Colombia, se necesita un Contralor con un perfil humanista, tener autoridad moral e independencia política ( cosa que dudo). Se les debe exigir, por lo menos, haber adquirido licenciatura en contabilidad, administración o economía, porque la administración es el conocimiento primario que deben tener las personas aspirantes a esos cargos públicos de relevancia.
Viendo tus fotos en Bolivia, te me haces muy parecido al presentador y productor de finanzas para CNN en Español Luis Carlos Vélez
Camilo, bienvenido a Colombia Digital.
¡Ya quisiera yo tener siquiera el sueldo y el puesto de Luis Carlos!
Un abrazo
Carlos, felicitaciones y adelante!
www.colombia-hoy.blogspot.com
Carlos:
Cien es un número mágico, porque demuestra disciplina y perseverancia.
Sin embargo, lo más importante es el contenido de ese número mágico: usted ha demostrado las cualidades, la ecuanimidad y el buen trato a la información.
Me siento honrado de ser su compañero en la Generación Invisible y de compartir con usted, sueños e ilusiones para trabajarlas en conjunto.
Un abrazo.
Publicar un comentario